Esta entrada la quiero dedicar a mostraros otra excentricidad de un adinerado ruso que no ha tenido otra cosa que hacer que a pesar de ver como muchos de sus congéneres pasan hambre y verdaderamente lo están pasando mal el se ha dedicado a recubrir su BMW M5 con una capa de oro de 24 kilates.
Esperemos que su dueño tenga mucho cuidado de donde aparca su coche ya que puede ser que un modelo que el valor de su carrocería sobrepasa con creces el de su mecánica tenga dificultades a la hora de que no se lo roben o desmantelen.
Por si alguno tiene duda de la autenticidad de esta obra tan sólo tiene que ver la foto donde aparece este modelo junto con su dueño mientras en las manos de este se puede ver un certificado de autenticidad.
Via: tuningspain