El nombre Marotti no me es familiar, pero si me dice que se asocia al mundo del automóvil inmediatamente pienso en algo rápido y de origen italiano. No me equivocaría en la primera parte de la respuesta, pero sí lo haría en la segunda. El Marotti es un trike inverso de desarrollo y fabricación polaco, un país que como industria propia automovilística solo tiene los antediluvianos Polonez. Nada que ver con el Marotti, que para empezar tiene dos ruedas delante y sólamente una rueda de medidas 275/45R17 detrás.
Su carrocería es de material compuesto, y posee un diseño cuando menos extravagante. El frontal está trufado de entradas de aire, los faros son pequeños y agresivos. De perfil y desde atrás parece una mezcla entre una lanzadera espacial y un caza a reacción, por esas aletas traseras a modo de spoiler. Su longitud es de 3.2 metros y mide 1.8 metros de ancho. Por su estabilidad no deberíamos temer, el centro de gravedad es muy bajo y los neumáticos son suficientemente anchos, amén de disponer de suspensión con tarado deportivo.
En cuanto a motor, está propulsado por un 750 cc Honda de cuatro cilindros en V y 100 CV de potencia a unas elevadas 11.000 rpm. Teniendo en cuenta que sólamente pesa 440 kg en vacío obtenemos una relación peso potencia de más de 200 CV/tonelada, digna de un Caterham. Esta característica a buen seguro proporcionará buenas prestaciones a este pequeño cohete del Este. La potencia pasa a la rueda trasera a través de una cadena y una caja de cambios secuencial de seis velocidades con marcha atrás.