Los que hayan visitado mi perfil sabrán que una de las joyas que siempre he querido tener en el garaje no es otra que un 1965 Shelby Mustang GT350 (a ser posible en blanco con bandas azules). Por eso no puedo más que alegrarme al ver que Shelby American ha resucitado el emblema GT350 para conmemorar el 45 aniversario del inicio de una leyenda del automóvil americano.
Tomando como base un 2011 Ford Mustang GT y por la nada despreciable cifra de 33.995 dólares (más el precio del coche, claro), puedes hacerte con los servicios de uno de estos espectaculares 2011 Shelby Mustang GT350 de edición limitada.
Si comparamos estética con su hermano mayor, el 2011 Shelby Mustang GT500, veremos que hay cambios más que evidentes entre uno y otro. Esto es así porque sus diseñadores han querido adaptar la estética de 1965 a las necesidades aerodinámicas de nuestros tiempos. Y han coseguido un resultado bruto, bruto, bruto.
Como es lógico pensar, si este 2011 Shelby Mustang GT350 evoluciona desde el nuevo 2011 Ford Mustang GT, su motor es el nuevo V8 5.0 Ti-VCT, pero modificado para entregar 500 CV gracias a un compresor volumétrico, también de Shelby. Esto es, 88 CV más de potencia a cambio de sacrificar algo de su historia, el motor atmosférico.
El sonido es también algo que es necesario cuidar en estos coches, a parte de la potencia bruta. Por eso, tanto Shelby American como Borla Exhaust han trabajado en equipo para dotar a esta preciosidad unos colectores exclusivos, así como una completa línea de escape y silenciosos. Todo exclusivo para él y que según reza la nota de prensa, hace que el sonido nos transporte a 1965.
Pero de potencia no se vive únicamente. Para su diseño, también se ha pensado en la funcionalidad y en mejorar sus características en circuito. De ahí que se le haya equipado con un nuevo sistema de suspensiones de Ford Racing, diseñadas también específicamente para este 2011 Shelby Mustang GT350.
Y un cacharro así también hay que pararlo, no todo va a ser acelerar y acelerar sin control. Para esta titánica tarea, nada mejor que un juego de frenos Baer Claw, también exclusivos y desarrollados con la colaboracióndel equipo técnico de Shelby.
Por último, las mejoras aerodinámicas tienen tanto funciones de mejorar su penetración en el aire (aerodinámica pura y dura, vamos) como funciones de refrigerado tanto del motor como del sistema de frenos. Toda entrada de aire que se ve en su carrocería, tienen una función específica en ese sentido.
Como en toda edición limitada que se precie, los interiores también se han modificado para dar a entender que estamos ante eso mismo, una edición limitada. De ahí que podamos ver en su interior varias placas recorando el 45 aniversario del modelo original, pertinentemente firmadas por el Big Boss, Carroll Shelby.
Tanto los asientos delanteros como los traseros reciben una nueva tapicería, con los bordados en rojo y el emblema GT350 en los respaldos. El volante también es exclusivo para el 2011 Shelby Mustang GT350 (aunque no veo ninguna diferencia), y se han añadido detalles tanto al salpicadero como la pilar A del conductor, con tres nuevos relojes de medición.
En definitiva, una creo que más que digna reinterpretación de un clásico del automóvil americano, que significó el inicio de lo que ahora conocemos como Shelby Mustang. Lástima que sólo sea para Estados Unidos, como siempre…