Tras desvincularse por completo de Mercedes-Benz, tanto en lo deportivo como en lo comercial, McLaren va camino de convertirse en un fabricante digno de rivales como Ferrari o Lamborghini. Y aunque en su historia esté presente uno de los mejores superdeportivos de todos los tiempos, el McLaren F1, eso siguen siendo palabras mayores.De momento el primer reto que tienen por delante es la llegada al mercado en 2011 del McLaren MP4-12C, un deportivo que curiosamente y aunque ya lo hayamos visto en imágenes aún sigue desarrollándose en las instalaciones de Woking (Inglaterra) para asegurarse de que para la fecha de su lanzamiento esté todo a punto.
Lo que sí es seguro es que el corazón de este impresionante deportivo será un 3.8 V8 doblemente turboalimentado para desarrollar 600 CV que según los ingenieros de McLaren Automotive serán suficientes para enrojecer a todos sus rivales, entendemos que el Ferrari 458 Italia y el Lamborghini Gallardo. En cualquier caso hasta marzo no nos darán las cifras concretas y definitivas.
Lejos de Inglaterra, concretamente en el circuito de pruebas de Applus IDIADA en Tarragona (España) y en las carreteras públicas que lo circundan, los tests se centralizan en dos prototipos: el XP8 y el XP10, dos mulas de prueba que en las últimas semanas han soportado una carga de trabajo de 24 horas diarias / 7 días a la semana con más de 20 técnicos rodando para asegurarse de que todo está a punto.
Hablar de McLaren es hablar del McLaren F1, pero también recordemos que en 20 años se puede decir que ese ha sido el único deportivo de calle que han construido por sus propios medios, por lo que el esfuerzo por convertirse en rivales de marcas con tanto prestigio debe estar aún más reconocido.
Los planes a medio-largo plazo de McLaren Automotive no se quedan en el MP4-12C. De hecho a éste le seguirá una versión aligerada de prestaciones aún mayores siguiendo el estilo de los Scuderia y los Superleggera. Pero sin duda alguna el modelo que acaparará toda la atención será el nuevo superdeportivo que se erigirá como el sucesor del McLaren F1 y que pretende ser tan innovador (o más si cabe) que el propio F1 de los 90.
En fín, no sé vosotros pero yo me muero de ganas por ver las sorpresas que nos depara la compañía de Ron Dennis en los próximos años…